viernes, 28 de agosto de 2015

Reflexiones estivales.





Hace tiempo que ando con el blog muy parado, demasiado. Así que aprovechando este descanso estival me he propuesto volver a activarlo. La verdad es que el verano, sobre todo si estás de vacaciones y encima en la playica, es ideal porque se te ocurren multitud de ideas "brillantes" y numerosos post que escribir. Son tan buenos y "grandiosos" que te da una pereza enorme ponerte manos a la obra con ellos y entonces decides posponer la tarea a "en cuanto llegue a casa, sin falta, ¡de verdad eh!". Y entonces, como rey de los procrastinadores y recordando los antecedentes te dices a ti mismo "con que al final escriba un 10% me valdría" sabiendo que ni eso cumplirás. En fin...

Así que aprovechando  que mientras andaba yo flotando en la piscina se me han ocurrido un par de reflexiones chorras pero resulta que me he acordado que no tengo el ordenador, ¡bendita excusa!, pues he decidido hacer un mini post dando rienda suelta a alguna que otra chorrada. Pido perdón de antemano porque está íntegramente escrito desde el móvil y no gasto un última generación de esos con pantalla más grande que las tablet. 

Bueno, al grano. Como os he dicho andaba yo flotando en tan líquida sustancia cuando me he puesto a reflexionar sobre el estado de la ciencia actual y nuestro conocimiento de ella. Os lo aseguro, casi me ahogo... Pero enseguida, imagino que fruto del estado propio de esta fase vacacional o bien por la anoxia cerebral de mi cuasi hidrocución me ha entrado el optimismo. Y he pensado que al fin y al cabo no hemos salido tan mal parados teniendo en cuenta toda una serie de adoctrinamientos con los que hemos sido bombardeados desde nuestra más tierna infancia. He empezado a recordar que somos la generación que bebía zumos de naranja de un trago para que no se fueran las vitaminas, nuestras madres (eran las que luchaban con nosotros por aquella época) tenían menos miedo a que nos ahogaramos que a que una sola vitamina saliera volando. Yo pensaba por aquel entonces "¿y a donde van todas estas vitaminas que salen volando de los zumos?". Ahora pienso que de ser cierto hubiéramos llegado a crear una capa semejante a la de ozono pero esta de vitamina C... 

También hay que recordar que fuimos aquellos mozalbetes que aguardaban durante horas, con lágrimas en los ojos tamaño "king size" delante de la piscina para que no se nos cortará la digestión. Eso si, si te sumergías inmediatamente tras la ingesta ya no pasaba nada, rompías el maleficio y luego ya podías meterte sin esperar...

También fuimos salvados de morir en numerosas noches, gracias a nuestras abuelas (eran las que nos arropaban), de unas diabólicas plantas que al estilo de los Gremlins mutaban por la noche y empezaban a lanzar dióxido de carbono en proporciones descomunales como para ahogarnos en nuestras habitaciones estancas...

Así mismo fuimos convenientemente alertados de no tomar un zumo de naranja después de la leche o un yogur, es más después de la leche mejor nada. Ya lo decía el refrán "después de la leche nada eches", sencillo, directo y contundente...

En fin, que me ha dado por pensar que visto lo visto no hemos salido tan mal parados... O al menos eso es lo que creo que he pensado mientras estaba tumbado en el borde de la piscina y un fornido socorrista (que blandía un generoso mostacho) trataba de acercar su boca a la mía mientras yo gritaba ¡¡las vitaminas...que se van las vitaminas...!!

Bueno, pues eso, que si he despertado una sonrisa entre vosotros me alegro, y si no pues lo siento, pero la culpa será siempre vuestra por buscar humor en un blog "serio" como este... :-D

P.D. Pedir, una vez más, disculpas de antemano por las posibles erratas de esta entrada escrita y subida con el móvil.


Y recordad siempre: Magia..., No, Ciencia!!

También puedes encontrarnos en Twitter en: @Cuantosycuerdas




6 comentarios:

  1. Muy buenas, amigo.
    Este año se nos ha pasado pero para el próximo avisa que estamos muy muy cerquita en verano ;-)

    Un abrazo

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    1. Hola tocayo!! Tienes toda la razón y lo pensé, pero al final los días se quedan cortos y se echa el tiempo encima. Pero por supuesto que está ahí pendiente.

      Un abrazo.
      Dan.

      P.D. Lo mismo te digo por si te acercas por mis dominios.

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  2. No están mal las reflexiones. La verdad es que tienes razón, pero no todo el mundo ha avanzado igual. Todavía hay gente, y con estudios superiores y seria, que sigue pensando en cosas como las del zumo. Ayer, sin ir más lejos se lo escuché a un compañero de trabajo...
    Suerte que el socorrista llegó a tiempo 😄

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    1. Hola Jorge, tienes toda la razón y además creo que el tema del zumo es de las más extendidas pero recuerda mí estado eufórico vacacional con tendencias al optimismo. Seguro que en Enero el tono del post habría sido otro :-DD
      De hecho mientras flotaba en la piscina y pensaba en esta idea veía a una niña que me miraba con envidia mientras preguntaba "¿Mamá, cuanto me queda?" y la madre respondió "3 minutos" (verídico).

      Un abrazo.
      Dan.

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  3. Bueno, yo creo que algunas de estas cosas aún están vigentes, como dice Jorge... pero también que cada vez menos. Poco a poco...

    Un saludo!

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    1. Hola David, como le digo a Jorge tienes toda la razón. Echa un vistazo a mi respuesta. Pero como bien dices poco a poco.

      Un saludo.
      Dan.

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